En este blog he denunciado, hace pocos días y por enésima vez, la brutal desforestación a la que se está sometiendo ciertos lugares de la isla de Sumatra (Indonesia), y que llega a poner en peligro de extinción a especies como el tigre de Sumatra, el orangután y otros mamíferos de gran tamaño.
Según datos recientes de Greenpeace, las selvas vírgenes de Indonesia están desapareciendo a un ritmo elevadísimo, del orden de nueve piscinas olímpicas por minuto, una situación que está motivada por la necesidad empresarial de conseguir nuevos cultivables para la plantación de palma aceitera, la principal impulsora de la destrucción de los bosques en esta región. Esta destrucción de los bosques tropicales acelera el cambio climático y causa conflictos con las comunidades locales.
Una investigación de Greenpeace, hecha pública el 26 de febrero pasado, ha podido verificar que el hábitat del orangután está disminuyendo de manera alarmante pata ser transformado en plantaciones. Las tierras desforestadas pertenecen al Grupo de plantaciones BW, una empresa a la que se vinculada con la muertes de orangutanes en el Parque Nacional Tanjung Puting. Greenpeace ha documentado, además, que la tala continuada dentro de otras concesiones a dos otros productores guarda relación con su suministro de aceite de palma a la multinacional Procter & Gamble (P&G).
Postura de los conservacionistas.
Greenpeace considera que la producción y exportación de aceite de palma ha de servir al desarrollo económico de Indonesia. Y pone por ejemplo a los productores que forman el Innovation Group, que junto con el compromiso de otras grandes empresas del sector como GAR y Wilmar, demostrarían que se puede hacer negocio de manera responsable.
Para Hamid Areeba, experto de la campaña de Bosques de Greenpeace Internacional, «La multinacional que fabrica los champús Head & Shoulders tiene que dejar de implicar a los consumidores con la destrucción de los bosques tropicales”. Una opinión que comparte Bustar Maitar, el responsable de la campaña, que opina que «Procter & Gamble debería seguir el ejemplo de empresas como Unilever, Nestlé y L’Oréal, que ya se han comprometido a limpiar sus cadenas de suministro». Según Maitar “Procter & Gamble y otras empresas como Reckitt Benckiser o Colgate Palmolive no tienen excusas para demorar una acción inmediata que evite más deforestación».
Las compras de la multinacional a las empresas afincadas en Indonesia está facilitando un grave deterioro medioambiental, y Greenpeace ha criticado que ésta “en lugar de tomar medidas urgentes se ha dedicado a lavar su imagen pública”. Motivo por el que el pasado mes de febrero la organización conservacionista emprendió una campaña en la que solicita a P&G que no compre más aceite de palma en la zona. Greenpeace ha enfocado su campaña en la necesidad de defender el hábitat del tigre de Sumatra, al que la desforestación está poniendo en peligro de extinción. Según datos facilitados información recientemente por la organización ‘Salva la Selva’, P&G procesaría anualmente la friolera de 460.000 toneladas de aceite de palma de origen indonesio.
La campaña continúa abierta, y he encontrado un enlace en inglés que, aunque inicialmente da la impresión de estar estropeado, al cabo de un momento da paso a la ciberacción en castellano. Al pie de este artículo he incluido un enlace con el mencionado estudio de Greenpeace, y en este otro enlace podéis firmar.
Ya puestos, os facilito la ciberacción propuesta por Avaaz.org la semana pasada en defensa del hábitat de los orangutanes. Esta está dirigida al Gobierno indonesio y lleva más de 781.000 firmas recogidas.
Otra campaña, y que es la que me moviliza hoy, es la que protagoniza Salva la Selva contra la desforestación. Esta organización, que preside Guadalupe Rodríguez, afianza día a día su importancia en la defensa de los espacios selváticos, en cualquier lugar del planeta.
El grupo, que tiene su sede en Alemania, pone nombres propios a las empresas responsables de la desaparición de las grandes superficies arbóreas en beneficio del cultivo de aceite de palma, para la fabricación de biocombustibles y cremas de cosmética. En ese listado aparecen Procter & Gamble, BW Plantation (BWPT), KLK Oleo y PT Musim Mas, además de Wilmar International y la norteamericana Cargill, estas dos últimas en calidad de intermediarias con P&G.
Campaña de Salva la Selva contra la desforestación.
Salva la Selva acaba de lanzar una recogida de firmas dirigida a Procter @ Gamble contra la desforestación. Quiere conseguir que la multinacional renuncie de inmediato a sus compras en la zona, y no a partir del año 2020 como ha anunciado, sino inmediatamente. Considera que para entonces sería ya demasiado tarde porque, a su criterio, ya no quedarán bosques que salvar.
Justifica la organización que Greenpeace ha evaluado imágenes de satélite eque muestran talas severas de selvas primarias en Papua. El responsable de éstas sería Rimba Mestoa Lestari, una empresa también proveedora de P&G, y que desde 2009, y hasta hace poco, habría destruido una concesión de unas 30.000 hectáreas de selva.
Algo parecido a lo que está sucediendo con otros proveedores de aceite de palma de P&G, como BW Plantation, denunciada por Greenpeace por talar en Kalimantán Central varias áreas habitadas por orangutanes. O con Rokan Adi Raya, concesionaria del área donde se encuentran amenazados de extinción los últimos tigres de Sumatra. Desforestación a la también contribuyen KLK Oleo y PT Musim Mas.
P&G se ha comprometido a que, a partir de 2015, sus proveedores tengan que demostrar de dónde proviene su aceite de palma. Y ha asegurado que a partir de20 prescindirá totalmente de aceite de palma proveniente de lugares que hayan sido talados. Pero Salva la Selva considera que esa fecha es demasiado tardía. Hoy día, las plantaciones de palma cubren 10 millones de hectáreas en Indonesia, y para 2020 éstas serían el doble ya.
A la vista de la dramática situación en que se encuentra la selva indonesia, Salva la Selva considera que no es aceptable esperar seis años más para renunciar a utilizar la palma de aceite cosechada en estos espacios previamente talados, y cataloga la promesa de P&G de maniobra para ganar tiempo.
Por este motivo pide nuestro apoyo. En tanto que consumidores tenemos una fuerza muy importante para acabar con esta situación. Por favor, firma aquí y difunde.
Si, por otra parte, sientes alguna curiosidad por conocer algunos de los principales bancos y accionistas de P&G puedes consultarlos aquí. Entre ellas encontrarás, por citar sólo una, a la JP Morgan Chase & Company, involucrada en el negocio de las ‘suprimes’ que desembocó en la crisis económica actual, y accionista de Red Eléctrica de España.
Un ecologista en El Bierzo.
Procter @ Gamble.
Procter & Gamble es una multinacional de bienes de consumo, principalmente de productos higiénicos y de limpieza, situada entre las mayores empresas del mundo en capitalización de mercado. Dirigida por Alan G. Lafley, tiene presencia en más de ciento sesenta países, produciendo y distribuyendo marcas muy conocidas como Gillette, Duracell, Ariel, Tampax, H&S (Head&Shoulders), Pantene, Max Factor, Oil of Olay, Pampers, y Don Limpio (ex Mister Proper), entre más de 300 consumibles diarios.
Greenpeace vincula a la multinacional Procter & Gamble con la destrucción de los bosques de Indonesia. 26/02/14. Greenpeace.org.
Accionistas principales de Procter @ Gamble. Es.finance.yahoo.com.
Ranking empresarial según criterios de sostenibilidad en sus suministros de aceite de palma (en inglés). 2014. Greenpeace.org.
Estudio de Greenpeace sobre la relación de G&G con la desaparición de la selva de Indonesia. 26/02/14. Greenpeace.org. Pdf.
Musim Mas prevé tener el biodiesel de Castellón a pleno gas a final de año. 11/04/14. Expansion.com.
JP Morgan acepta pagar una multa histórica para cerrar la crisis de las ‘subprimes’. 08/01/14. Unecologistaenelbierzo.wordpress.com.
Campaña de Avaaz para salvar la selva de Aceh y evitar la extinción de los orangutanes. 21/04/14. Unecologistaenelbierzo.wordpress.com.